1. Todos los niños llevan dentro un potencial de grandeza.
2. Un desarrollo infantil saludable requiere un fuerte desarrollo académico, socio-emocional y del talento personal.
3. Un desarrollo académico sólido debe poder demostrarse a través de medidas objetivas.
4. En todos los ámbitos del desarrollo infantil, no todo lo que importa puede medirse objetivamente.
5. La diversidad enriquece nuestra experiencia y nos prepara mejor para un mundo cada vez más complejo.
6. Un compromiso a largo plazo entre los miembros del personal para desarrollarse y apoyarse mutuamente profundiza el impacto positivo de una escuela en sus alumnos y su comunidad.
7. La educación de un niño se produce en medio de una asociación entre la escuela y la familia; una asociación sólida aumenta las probabilidades de éxito a largo plazo del niño.
8. El camino más claro para convertirse en una gran escuela es aprender de los grandes modelos.